Motivación pensamiento positivo

El pensamiento positivo va mucho más allá que mostrar una imagen feliz o una actitud positiva. Los pensamientos positivos favorecen a construir valores en tu vida y te ayudan a desarrollar habilidades que te servirán a la hora de afrontar situaciones en determinados momentos de tu existencia.

 

Los pensamientos negativos y sus consecuencias cuando no los escuchamos 

Imagina por ejemplo  que estás caminando por un bosque y, de repente, un león se interpone en el camino que tienes delante. Cuando esto sucede, tu cerebro registra una emoción negativa, en este caso, miedo.

Imagina por ejemplo el caso del asesinato de una maestra que tenía a un asesino al lado de donde ella vivía. Su primera emoción fue “negativa” ya que sintió miedo. Y a continuación surgió un pensamiento “negativo” y así lo expresó a su novio a través de un wasap,” tengo un vecino que me da miedo”

Si escucho la emoción , lo primero que me indica es vete de este lugar ya, coge tus cosas y vete. El pensamiento nos bloquea, nos entretiene, nos engaña y nos dice cosas como, “no seas exagerada, no pasa nada, no te va a pasar nada, estate tranquila, es muy importante escuchar a nuestra intuición, a lo primero que pasa por nuestra mente y actuar consecuentemente.

Las emociones negativas programan tu cerebro para desempeñar una acción concreta. Por ejemplo, cuando el león se pone delante de ti, comienzas a correr inmediatamente instintivamente sin ver ni pensar más allá. Estás absolutamente concentrado en el león, el miedo que ocasiona y cómo puedes escapar de él.

 

Las emociones negativas ciñen tu mente y limitan tus pensamientos

En el momento que tienes al león delante es posible que tengas la opción de subir a un árbol o agarrar un palo para defenderte, pero tu cerebro ignora todas esas opciones porque parecen irrelevantes cuando un león se encuentra delante de ti.

La parte de nuestro cerebro primitivo todavía sigue programado para responder a las emociones negativas de la misma manera que hace millones de años cuando los neandertales tenían que huir del peligro de ser devorados cuando se encontraban con animales salvajes. Nos cerramos al mundo exterior y nos limitamos solo a las opciones que vemos a nuestro alrededor y en función de eso actuamos. 

 

Consecuencias de los pensamientos negativos

Por ejemplo, cuando estás en una pelea con alguien, tu ira y tus emociones pueden consumirte hasta el punto de que no puedas pensar en otra cosa. O, cuando estás estresado por todo lo que tienes que hacer hoy, puede que te resulte difícil comenzar cualquier cosa porque estás paralizado por lo larga que se ha vuelto tu lista de tareas pendientes. O, si te sientes mal por no practicar deporte o por no alimentarte de una forma sana. Te martirizas pensando en la poca fuerza de voluntad que tienes, en lo vago que eres y en que no tienes ninguna motivación.

En cada caso, tu cerebro se cierra al mundo exterior y se enfoca en las emociones negativas de miedo, ira y estrés, tal como lo hiciste con el león. Las emociones negativas evitan que tu cerebro vea las otras opciones y elecciones que te rodean. Es tu instinto de supervivencia el que está hablando por ti, no tu razón.

 

¿Qué le hacen los pensamientos positivos a tu cerebro?

Barbara Fredrickson, profesora de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill (EUA), y una de las investigadoras más importantes en el ámbito de la Psicología Positiva comprobó científicamente el impacto que tienen las emociones positivas en el cerebro a través de un experimento. Dividió a sus sujetos de investigación en 5 grupos y a cada uno de esos cinco grupos les hizo visualizar diferentes clips de película.

Los dos primeros grupos vieron secuencias con imágenes positivas. El grupo uno vio clips que originaban sentimientos de alegría. El grupo dos recibió un estímulo de imágenes que les provocaba sentimientos de satisfacción.

El grupo 3 visualizó imágenes neutrales que no suscitaban ninguna emoción en particular.

Los dos últimos grupos visualizaron clips de emociones negativas. El grupo cuatro vio imágenes que incentivaban sentimientos de miedo. Al grupo cinco le mostraban imágenes que creaban sentimientos de ira.

Posteriormente, se pidió a cada participante que se imaginara a sí mismo en una situación en la que surgirían sentimientos similares y que escribiera lo que harían. A cada participante se le entregó una hoja de papel con 20 líneas en blanco que comenzaban con la frase «Me gustaría …»

Los participantes que vieron imágenes de miedo e ira anotaron la menor cantidad de respuestas. Por otro lado, los participantes que vieron imágenes alegres y satisfactorias, redactaron un número mucho mayor de acciones que llevarían a cabo.

De esta forma se manifestó que cuando experimentamos emociones positivas como alegría, satisfacción y amor, verás un mar de posibilidades en tu vida. Estos hallazgos fueron de los primeros que demostraron que las emociones positivas amplían tu sentido de buscar más medios para lograr tus objetivos y abrir tu mente a más opciones.

 

El pensamiento positivo construye habilidades

Los beneficios de los pensamientos positivos cortos van más allá. De hecho, el mayor beneficio que brindan los pensamientos positivos es una mayor capacidad para desarrollar habilidades y recursos para usar más adelante en la vida.

Por ejemplo, un niño que corre afuera, columpiándose en las ramas y jugando con amigos, desarrolla la habilidad de moverse atleticamente (habilidades físicas), la habilidad de jugar con otros y comunicarse con un equipo (habilidades sociales) y la habilidad de explorar y examinar el mundo que le rodea (habilidades creativas). De esta forma, las emociones positivas del juego y la alegría impulsan al niño a desarrollar habilidades que son muy valiosas en su vida.

Estas habilidades duran mucho más que las emociones que las iniciaron. Años más tarde, esa base del movimiento atlético podría convertirse en una beca como atleta universitario o las habilidades de comunicación pueden convertirse en una oferta de trabajo como gerente comercial. La felicidad que promovió la creación y exploración de nuevas habilidades se mantuvo durante un corto periodo de tiempo, pero las habilidades en sí perduran en el transcurso de los años.

Fredrickson se refiere a esto como la teoría de “ampliar y construir” porque las emociones positivas amplían tu sentido de posibilidades y abre tu mente, lo que a su vez te permite desarrollar nuevas habilidades y recursos que pueden proporcionar valor en otras áreas de tu vida.

 

Cómo aumentar el pensamiento positivo en su vida

¿Qué puedes hacer para aumentar los pensamientos positivos y aprovechar la teoría de «ampliar y construir» en tu vida?

Date permiso para sonreír y disfrutar de los beneficios de las emociones positivas. Saca tiempo para descubrir aquello que te llena de felicidad y practícalo a menudo. Cualquier cosa que provoque sentimientos de alegría, satisfacción y amor funcionará. Ya sea meditar, escribir, jugar y vivir aventuras para que puedas experimentar satisfacción y alegría, explorar y desarrollar nuevas habilidades.

La felicidad es tanto el precursor del éxito como el resultado del mismo. Las personas felices desarrollan nuevas habilidades, estas habilidades conducen a un nuevo éxito, lo que resulta en más felicidad, y el proceso se repite. Busca la alegría, juega a menudo y persigue la aventura. Tu cerebro hará el resto.

Con esta afirmación queremos ir más allá de que el pensamiento solo ayuda a sentirse bien. Evidentemente es genial «ser una persona feliz», pero esos momentos de felicidad también son fundamentales para abrir tu mente a explorar y desarrollar habilidades valiosas en otras áreas de tu vida.

 

Motivación pensamiento positivo

En ocasiones pasamos por experiencias o etapas que nos dificultan motivarnos para desarrollar pensamientos positivos. En Intelema podemos ayudarte a reconectar con tu potencial humano de manera consciente para superar ese mal profundo y sufrimiento por el que estás atravesando. Gracias a nuestro Método Zisne que reúne herramientas de inteligencia emocional, coaching y el inconsciente, te guiaremos para emprender acciones diferentes que te lleven a sentir una mayor satisfacción en el ámbito que necesites.